Los alumnos de 4 y 5 años estamos inmersos en el Proyecto del cuerpo humano. Hemos empezado investigando cómo somos por fuera: nuestras características (color de pelo, de ojos...), cuánto medimos y pesamos... Y nuestros cinco sentidos. Por eso hemos hecho distintos talleres, uno para cada uno.
Hoy os vamos a contar cómo han sido esos talleres en la clase de 5 años B.
VISTA
Hemos realizado juegos como el veo-veo o de memoria visual: ponemos una serie de objetos o tarjetas a su vista y quitamos uno y tienen que adivinar cuál falta. O, de forma similar, cada objeto tiene una ubicación concreta con un número y tienen qué decir el lugar en el que estaba la imagen de que se pide. Como en el siguiente video:
Buscamos distintas texturas por nuestra clase: lisas, rugosas, ásperas.... E investigamos sobre qué cualidades podíamos adivinar a través del tacto: el tamaño, la textura, la temperatura, la forma... Después elegimos unos objetos de clase y los metimos en la caja misteriosa. Con los ojos tapados había que adivinar qué objeto habíamos cogido.
OLFATO
La profe preparó unos paquetitos secretos con distintos olores. Con los ojos tapados tenían que descubrir de qué se trataba. Teníamos: pasta de dientes, vinagre, orégano, curry, comino...
OÍDO
Hicimos distintos juegos:
- Tapamos los ojos a un alumno/a y otro/a compañero/A dice “hola”. El/la que estaba con los ojos tapados tiene que adivinar quién lo ha dicho.
- El juego de las llaves. Un niño/a se sienta en el centro de la asamblea con los ojos tapados y un manojo de llaves delante . La profe tiene que señalar a un niño para que venga gateando a por las llaves. Si el/la de en medio detecta de dónde viene el ruido (señalando con el dedo) continua en el centro, si le quitan las llaves, se cambia.
- Memory auditivo. Tenían que encontrar la pareja solo a través de nuestro oído
- Discriminación auditiva. Adivinar qué sonido del cuerpo humano estamos escuchando:
GUSTO
Para trabajar este sentido la profe nos preparó una bandeja de fruta y galletas. Algunos se taparon los ojos y probaron el trozo para adivinar qué era, otros con los ojos abiertos lo chuparon.. Lo importante es que todos y todas se animaron a probar un poco un trocito en nuestro taller del gusto.
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